Historia de Armenia, la tierra donde encalló el Arca de Noé

Según las evidencias arqueológicas, la existencia de la humanidad data del siglo 3 aC.

En Armenia podemos encontrar varios sitios arqueológicos que son testigos silenciosos del pasado. Muchos hallazgos arqueológicos se encuentran en el museo de Armenia, Ereván y en Metsamor.

La aparición de la primera comunidad armenia se produce relativamente tarde, concretamente a partir del siglo 13 se empiezan a formar pequeños principados llamados “países Nairi”.

En el siglo noveno, en el actual territorio de Armenia, desde Turquía hasta Irán se creó un nuevo reino llamado Urartu que se convirtió en el país más poderoso de Oriente Medio.

Según las investigaciones arqueológicas, el pueblo armenio se formó gracias a los Urartu en el siglo séptimo.

Según los escritos de Heródoto, los inmigrantes se mezclaron con la población local y tomaron el control encabezados por su gobernante Arame de Frigia y por ello al pueblo fue llamado Armenia.

Armenia es considerado el primer país cristiano del mundo.

En el año 301, cuando el Imperio Ruso empezó a tomar medidas en contra del cristianismo y la tolerancia, los armenios lo adoptaron como religión oficial. Gregorio Bartev fue quién renombró al rey Tiridates III de Armenia. Gregor fue canonizado por la Iglesia Apostólica Armenia bajo el nombre de “San Gregorio el Iluminador” y se consagró como el patrón de todos los armenios y del país.

A partir del siglo quinto, como resultado de un concilio en Calcedonia, la Iglesia Armenia se convierte al monofisismo. Según esta doctrina, Jesús sólo está presente en la naturaleza divina pero no en la humana. A día de hoy la creencia del país es conocida como la Iglesia Gregoriana Armenia.

En los siguientes siglos, Armenia experimentó varias invasiones de los romanos, persas, bizantinos y árabes que no dejaron nada de pie. Entre los siglos 11-13 los armenios resistieron el ataque de los mongoles y los turcos. Después de la caída de Constantinopla, se descompusieron varias regiones del Cáucaso que fueron repartidas entre Turquía y Persia. A partir del siglo 20, los turcos empezaron a destruir el territorio de Armenia que en ese momento pertenecía al Imperio Otomano.

Entre los años 1915 – 1917 se produjo el genocidio armenio provocado por el gobierno de los Jóvenes Turcos en el Imperio Otomano. El número de víctimas del genocidio superó a 1,5 millones (dos tercios de los que vivían en el Imperio Otomano eran cristianos). A día de hoy Turquía niega el hecho del genocidio a pesar de que ha sido reconocido por varios órganos de representación de diferentes Estados.

Después de la Primera Guerra Mundial, Armenia declaró su autonomía pero sólo hasta el año 1920 que fue cuando el país pasó a formar parte de la Unión Soviética. En el año 1991 Armenia volvió a declarar su independencia de la URSS y a día de hoy es una república independiente con un gobierno presidencial.